La mañana y su silencio de pájaros. El mediodía con sus gritos
de feria. La tarde y su abanico de tareas. Las voces como ecos. La noche y una
mesa conocida.
En un barrio platense de los 60, en la navidad optimista del 74,
en la noche de los 80, en un barrio pobre del gran Buenos Aires. En una
sobreabundante Italia. En una aldea eslava de trenzas y mujeres viejas.
La misma ronda, siempre. El ecuador
cruzando cada meridiano.
Mujeres ordenando las
vituallas.
Hijas soñando vivir sin argumento.
Siempre un amor y una muerte.
Un chico cayéndose de una bicicleta o un caballo.
Un hombre escondiendo su ternura.
Una seduccion.
Un aroma y una fruta.
Un secreto.
Una deuda impaga.
Una carcajada.
Hijas soñando vivir sin argumento.
Siempre un amor y una muerte.
Un chico cayéndose de una bicicleta o un caballo.
Un hombre escondiendo su ternura.
Una seduccion.
Un aroma y una fruta.
Un secreto.
Una deuda impaga.
Una carcajada.
Siempre.
Ucrania, agosto de 2015.
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